martes, 6 de enero de 2015

Inicios...

Todo comenzó cuando, aburrido de no hacer nada de actividad física, decidí retomar mis "pichangas" de futbolito con los amigos de la vida, esos que "casi nunca" fallan. Pues bien, comenzamos a jugar todos los jueves a eso de las 20 hrs, ya sea en Zamorano o bien en Club Tobalaba. Prometían esos partidos... entre amigos, lo pasábamos bien y ya hace bastante tiempo no le dábamos a la de 32 cascos...
Fueron semanas intensas, donde cada uno daba lo mejor de sí para no "arrugar" en el intento y que fueran unas jornadas deportivas de lo más entusiastas y relajantes...

Y digo "retomar", porque hacía varios años que no practicaba nada de deporte, específicamente desde el 2009, donde me operé del Ligamento Cruzado Anterior de mi rodilla derecha...era una lesión seria que venía arrastrando hace años y que no me dejaba tranquilo, para poder realizar actividad física (a lo cual estaba muy acostumbrado) y realizar labores cotidianas, como cruzar una calle, subir escaleras, etc.

Pero lamentablemente...en esas "pichangas", la rodilla nuevamente acusó recibo de las fintas, piques, giros, etc...al parecer, el tiempo de colgar los botines se acercaba, así que opté por dejar de jugar futbolito y ver qué otro deporte hacía..., por el bien de mi salud y mi cuerpo, que ya estaba pasado en varios kilitos...

Al mismo tiempo, me estaba picando el bichito de las carreras por cerro... vi un aviso de una carrera Merrell en Chicureo y me inscribí. Siempre me gustó la montaña, hacer trekking y estar en contacto con la naturaleza, obviamente esto era diferente, pero se asemejaba a lo que me gustaba. En ese tiempo no sabía nada de carreras de Trails y ni me imaginaba con qué me iba a encontrar.
Y para no ir sólo, convencí a mi amigo del colegio, mi partner, el Toyo quien, a regañadientes, accedió.

Y finalmente llegó el día, me preocupé de pasarlo a buscar para asegurarme de que no arrugara.
Llegamos a Chicureo, específicamente al Parque Outlife Piedra Roja..., ya desde la ruta se apreciaban grupos grandes de personas con la polera Merrell de color verde, que ese fecha (17 de agosto de 2013) era la polera oficial de la carrera.


Toyo y Yo, previo carrera.



Primero vino el precalentamiento...algo tímidos nosotros con mi socio, sumado al hecho de que éramos primerizos en estas lides... dos viejotes de 43 años y que "deberíamos venir de vuelta"; sin embargo, no éramos los únicos, habían varios más como nosotros que comenzaban ese día o llevaban muy poco en este nuevo deporte.
Se acercaba el momento de la partida... y con algo de angustia veíamos los primeros metros de trayecto...pura subida de cerro..., de entradita se nos venía difícil la cosa...pero bueno, ya estamos acá y habrá que aperrar.
Y eso hicimos...la partida fue a tropezones entre los demás corredores, si mal no recuerdo éramos más de 1800, de todas las edades y estados físicos...sinceramente creo que nosotros éramos del montón, del montón hacia abajo...jajajaja, pero en fin, ya estábamos ahí y había que dejar el orgullo personal y amor propio en cada metro de recorrido.
La primera parte de la carrera, esa subida larga y tediosa, fue lenta, debido a que el camino se angostaba y con ello, formábamos una larga hilera verde, que se hacía cada vez más lenta.
No faltaban los que nos pasaban corriendo, sí!! corriendo cerro arriba...me preguntaba..."cómo pueden wn? si la subida está pesada"..., y con cada inhalación y exhalación y paso que daba...me decía: "en qué cresta me metí?", pudiendo haberme quedado acostado, tranquilo, enredado en las sábanas... en cambio estaba soportando un sol implacable, ejercicio físico extremo (en ese momento era extremo), polvo y sed.

Después que la masa de gente se fue separando, no tan compacta, aproveché algunos momentos de "respuesta adrenalínica" y también hice lo mío...avancé trotando cerro arriba, por pendientes que subían y después bajaban...para después subir y nuevamente volver a bajar... era como un resto energético que me venía de no se dónde... podía pasar a otros runners que iban a media máquina u otros que paraban a descansar o a tomar fotografías.
Y así transcurrió gran parte de los 10K que tenía esta fecha... como era primerizo, paré varias veces a descansar, tomar algo de agua, estirar..., las piernas no respondían muy bien después del primer tramo de la carrera, en donde muchos "K" eran de subida y eso "mató" a muchos primerizos o quizás no lo eran tanto. Pero al llegar al primer punto de hidratación, cual alivio que cayera del cielo, las fuerzas fueron recobrándose poco a poco y ya sabiendo que quedaban algo así como 7K, apliqué lo que había leído o escuchado en un comentario de algún runner de calle... "no solamente se corre con las piernas, sino que con la cabeza"...
Iba embalado... no de rapidez, sino que convencido de apelar a mi capacidad aeróbica que siempre tuve y que por circunstancias de la vida había perdido, la edad, el peso, el carrete, etc.
A esta altura de la carrera, los metros iban pasando como si fuera cuesta abajo en bicicleta, le iba poniendo velocidad en algunos tramos, algo de técnica en las bajadas y me iba dosificando en las subidas..., me sentía excelente, compartiendo algo que me gustaba con muchas más personas que estaban en las mismas que yo, el paisaje era espectacular y ya quedaba menos.
En casi todo el trayecto no vi más a mi partner Toyo (Cristián), quizás lo dejé atrás en la partida o él me había pasado hace rato...esperaba sinceramente que no le diera una crisis de asma, pero recordé que precavidamente él andaba con su "puf", así que me relajé por él.

Y así, mirando el paisaje, pasando a más corredores y ser pasado por otros tantos, llegué al 2º Punto de Abastecimiento e Hidratación en los 7,5K... a estas alturas, ya era una proeza la que estaba haciendo, nunca había corrido tanto de una sola vez, ni 5K para empezar, ni siquiera en calle (no me gusta el running de calle), ni había entrenado para tal efecto... osea un completo neófito e irresponsable.
Mientras me tomaba sus buenos vasos de Gatorade y me comía naranjas y trozos de plátano (para prevenir los calambres) apareció mi buen amigo Toyo, con la cara enrojecida por el esfuerzo y jadeando porque le faltaba el aire, no más que eso, venía entero mi compadre y muy cerca mío. Intercambiamos unas palabras de lo difícil que había sido el inicio, pero que ya quedaba menos para terminar este suplicio...jajaja, par de wns pencas!!!
Partimos juntos el último tramo de carrera, conversando, dándonos ánimo.
Personalmente no me gusta conversar en una carrera porque prefiero dejar esa respiración para ese esfuerzo que estoy haciendo, después habrá tiempo de sobra en conversar y sacar conclusiones.
Y creo que el último kilómetro "me escapé" y apreté el paso para seguir a mi ritmo y tratar de dar el último esfuerzo "sobrehumano" jajaja en llegar digno a la meta.

Ese tramo final se me hizo eterno, no se acababa nunca, pero al fin pude divisar el gran arco de color naranjo que indicaba el fin de todo esto, de toda esta mini aventura en la que nos habíamos embarcado.
Mi tiempo final lo recuerdo como si fuese ayer: 2 horas 26 minutos!!!
Mis primeros 10K terminados dignamente, entero, re cansado, pero entero y crucé trotando la meta.
Me sentía a morir, quería puro echarme en el suelo, descansar, estirar las piernas y engullirme un litro de agua o isotónica...mi cuerpo, exhausto, lo pedía a gritos.

A los 3 minutos llegó mi cumpa Toyo, igual o peor que yo, pero habíamos cumplido!!! Habíamos hecho esos 10K sin entrenar, sin gimnasios, sin nada, con las ganas no más de estar ahí y correrlos.

Yo y Toyo...destruídos!!!


A pesar que no nos podíamos ni mover, por lo contracturados que estábamos, estábamos satisfechos con lo logrado y con ganas (por lo menos yo) de seguir en esto.
Y así, pasó una semana en que caminamos como robots!!! La contractura era parte de nuestro diario vivir esa semana...

Y sólo fue el Inicio....